viernes, 20 de mayo de 2016

DE REGRESO

Al momento de  ser exalumno del colegio sales y te encuentras con un gran mundo que no conocías siendo ya una persona con responsabilidades y realizar tratando de estudiar o trabajar, pero al momento de entrar de nuevo por esas puertas del colegio regresan a tu mente todas aquellas experiencias tenidas en el recordando con alegría o nostalgia.

El pasado 30 de abril el exalumno Cristian Camilo Chitiva de la Institución Educativa Técnica Nuestra Señora De Fátima Ibagué regresó a su querido colegio pero no como su estudiante ni como visitante, si no para hacer sus prácticas como maestro de artística.

Actualmente estudia artes plásticas y visuales en la Universidad del Tolima, hace poco decidió realizar sus prácticas en el colegio de sus recuerdos con el área de artística, orientada por el Docente Felipe Rodríguez. Su trabajo es principalmente observar, ver cómo es la metodología de trabajo del maestro Felipe; comprender la pedagogía que usa para el manejo de la clase y el manejo de los estudiantes. Al momento de preguntarle qué siente estar en el colegio no como estudiante pero si como maestro él responde: “Estar del otro lado de la mesa, por decirlo así es difícil, los maestros que llevan experiencia en el tema lo hacen de una manera tan sencilla, tan fluida. Para mí ha sido difícil estar al frente pues mi mayor temor siempre ha sido el de hablar en público”

Lo que más recuerda y le da nostalgia a Cristian, es ver el gigantesco patio de recreo, la cancha de fútbol, los pasillos y los salones de clase. Su más grande experiencia es recordar  la última fotografía que se tomaron como Promoción 2013 porque fue cuando todos se dieron  cuenta que sería la última fotografía de todos en grupo. Con ese uniforme, en ese lugar, en  la Institución.

Daniela Aguiar

sábado, 12 de marzo de 2016

RECUERDOS

La vida de cualquier persona está plagada de experiencias buenas y malas, por desgracia la mayoría de las veces aquellos malos recuerdos son los que rondan nuestras mentes, pero somos capaces de controlarlo. Era el año 2012, me arreglé, desayuné, la ruta me recogió y me llevó hasta el colegio, iniciamos clases, era un día común como cualquier otro, en medio del segundo descanso mi amigo Mora llegó de la nada al salón, tenía una propuesta una idea en mente. Me llamó y también a otros dos compañeros, nos dijo que podíamos tener la posibilidad de, en otras palabras, revivir lo poco que quedaba de la emisora escolar, que contábamos con el apoyo de la profesora Luz Amparo, quien fue la directora y fundadora.

La idea era, en ese entonces, un poco descabellada para mi gusto, tarde mucho tiempo en pensarlo, pero al final del día acepte la propuesta. Manejar un proyecto, sea lo más pequeño que sea, es un gran responsabilidad, la idea de realizar nuestro servicio social se vino al piso, ya que la emisora no se encontraba activa y legalmente no nos podrían firmar nuestras horas, pero decidí seguir adelante, hasta ese momento de los 4, solo quedábamos 3. Mora, Quintero y yo seguimos adelante, decidimos iniciar la emisora solo con música, no recuerdo el primer día que empezamos a poner música, pero poco a poco ese año los estudiantes sentían una pequeña diferencia en los descansos.

Empezamos con los mínimos recursos, un computador armado con piezas de varios computadores y con la misma edad de Matusalén, una planta de sonido y unos dos o tres bafles casi dañados, lo bueno es que la miel producida por las abejas que se encontraban en uno de esos bafles, era buena, un poco ácida, pero buena. Los meses que siguieron intentábamos hacer que los estudiantes interactuaron un poco con la emisora, buscamos nuevas personas que nos colaboraran y poco a poco íbamos armando el proyecto para la emisora, convertirse en líder es fácil, pero serlo es muy difícil.

A final de año el profesor Marco llegó al colegio y decidió apoyar el proyecto. El año siguiente continúe con el proyecto, con ayuda de mi ¨Pandilla¨ o sea, mi grupo de mejores amigos con los que aun, y con muchas dificultades, nos reunimos. En este nuevo año pasamos el proyecto poco a poco íbamos renovando recursos y ampliamos nuestro lugar de trabajo, tumbar una pared es más difícil de lo que piensan y más si se le tiene miedo a las alturas, casi no pude bajar por las escaleras, fue un día de risas.

Me encontraba en el colegio y la personera de esa época, mi fiel amiga y hermana del alma, Danna Ruiz, llego con una invitación a un encuentro de emisoras en el colegio INEM, y ella sería una de las acompañantes, el profesor Marco y una chica muy tímida de ojos hermosos. Llego el día de la reunión, presentamos el colegio y la emisora al público, nos divertíamos con nuestras pequeñas recochas, ese día entendí que las pequeñas decisiones que tomamos pueden llegar a cambiar nuestras vidas y ponen en nuestro camino personas nuevas que con el paso del tiempo se vuelven importantes para nuestras vidas, recuerdo que aquel día yo molestaba a aquella chica, me encantaban y encantan, sus ojos, no imagine una amistad con ella, pero siguió a lo largo de estos años y como dije antes, hay personas que se vuelven importantes para nosotros.

“Poder disfrutar de los recuerdos de la vida es vivir dos veces.” Marco Valerio Marcial


LARRY ROMERO